4.5 Agricultura
La función Agricultura incluye actividades consistentes en la promoción, regulación y control de la producción agrícola, ganadera, avícola, apícola, la caza comercial, protección de flora y fauna y explotación ictícola.
Los recursos totales asignados a la función agricultura para el ejercicio del año 2000, no mostraron diferencias significativas con respecto a los contemplados en 1999, sin embargo la ejecución del primer trimestre del presente ejercicio fue inferior a la de 1999.
La Secretaría de Agricultura Ganadería y Pesca tiene asignado el 65,3% del crédito de la función. Por intermedio del Programa de Formulación de Políticas del Sector Primario realiza la transferencia de fondos al sector privado e instituciones provinciales y municipales con el objetivo de promocionar la producción y la inversión sectorial, como así también el cambio tecnológico.
Dentro de este programa, el gasto principal corresponde a la actividad de apoyo a la reconversión del Sector Tabacalero que en el año 2000 cuenta con un crédito de $ 186,8 millones y representa el 80 % de los recursos del programa. Casi la totalidad de las erogaciones corresponden a transferencias. Las mismas son destinadas a las provincias y en los últimos años representaron el 95% del gasto total, el 5% restante se destinó a transferencias a las obras sociales vinculadas con el sector.
El Fondo Especial del Tabaco (FET) constituye un fondo especial que se financia mediante recursos con afectación específica (a través de un impuesto específico al consumidor de tabaco). El F.E.T fue creado por la ley 19.800/72, siendo su principal objetivo el de asegurar una retribución al productor tabacalero que le permita evolucionar de acuerdo al avance tecnológico. Por ello realiza transferencias a las unidades ejecutoras provinciales, quienes definen las prioridades en cuanto al destino de las mismas, que pueden ser subsidios a la producción de tabaco, asistencia financiera al productor y apoyo a planes de reconversión del sector tabacalero.
Los desvíos negativos observados en asistencia financiera a productores tabacaleros y en asistencia a comunidades aborígenes obedecieron a dificultades institucionales y legales en los procesos de ejecución.
El desvío negativo observado en asistencia financiera a productores forestales, está originado presuntivamente en la cautela del sector productivo frente a la depresión de la actividad comercial. En consecuencia esta retracción se vió reflejada en la compra de insumos para la producción de plantines y determinó la menor cantidad de superficie forestada.
El objetivo del programa Investigación y Desarrollo Pesquero, llevado a cabo por el Instituto Nacional de Investigaciones y Desarrollo Pesquero (INIDEP), es contribuir a la administración racional de los recursos vivos del mar y de las aguas interiores nacionales, asesorando a las autoridades gubernamentales y al sector productivo. Asimismo, son de su competencia el perfeccionamiento y desarrollo de los sistemas de captura, artes de pesca y procesos asociados, el desarrollo y/o captación de tecnologías de cultivo de organismos marinos y de agua dulce de interés comercial, y la adquisición de información y conocimiento para la evaluación económica y social de las pesquerías, además de la valoración de los efectivos pesqueros y la biodiversidad.
Las actividades más relevantes de dicho programa son la de pesquerías, información, operación, tecnología y control ($ 4,0 millones) y armamento de buques ($ 3,6 millones).
El objetivo del programa bajo responsabilidad del Instituto Nacional de Semillas (INASE) es lograr una mayor eficiencia en la producción agrícola merced al análisis y control de las semillas que la misma utiliza. También es responsable de estimular el desarrollo de la actividad de fitomejoramiento y complementariamente busca estimular la exportación de semillas de producción local.
El desvío positivo hallado en la certificación de semillas obedeció a un aumento de la demanda del mercado. Asimismo, el otorgamiento de títulos de propiedad intelectual mostró una mayor ejecución que la prevista originado en el aumento de respuestas favorables a la publicación de avisos. Sin embargo, en los análisis de calidad de semillas y en el control de la calidad de productos se generaron desvíos negativos. En el primer caso se realizaron menos análisis como consecuencia de un menor requerimiento de certificados internacionales, y en el segundo caso, se ejecutaron menos inspecciones debido a que se necesitó más tiempo en el control de lotes y semillas importadas.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) es el encargado de ejecutar las políticas en lo referente a la salud y sanidad animal y vegetal, programando las tareas necesarias para diagnosticar, prevenir controlar y erradicar las enfermedades y plagas de los mismos.
Los programas que lleva a cabo el SENASA son: Protección Vegetal, Servicios de Laboratorio, Aprobación de Agroquímicos, Productos Farmacológicos y Veterinarios, Fiscalización Agroalimentaria y Sanidad Animal, además de las Actividades Centrales.
En los análisis cualitativos y cuantitativos de riesgo de plagas se observó una ejecución menor a la programada, originada en la disminución de la demanda por parte del sector importador. Asimismo, en los análisis de tratamientos especiales sobre protección fitosanitaria y en las autorizaciones fitosanitarias de importación de organismos de control biológico se recibieron un menor número de solicitudes que las programadas, generando como consecuencia los desvíos negativos correspondientes.
La ausencia de controles de foco de plaga se debió a que no se detectaron ingresos de plagas cuarentenarias al país. En el mismo sentido no hubo demanda para el diseño y desarrollo de tratamientos de control de plagas.
El desvío negativo en la habilitación de cámaras para tratamiento cuarentenarios resultó de la reprogramación de la tarea a otros trimestres, en tanto que el correspondiente a la habilitación de viveros como expendedores de material certificado se debió a que se están realizando las actividades previas para la implementación de una nueva normativa.
En cuanto a las habilitaciones de predios cuarentenarios, los desvíos fueron atribuibles a una mayor demanda.
La supervisión de tareas y control fitosanitario y la operación de red de trampeo para picudo algodonero en zonas de cultivo se vieron afectadas por problemas financieros.
Los Servicios de Laboratorio reflejaron una disminución de la demanda que provocó desvíos negativos en la cantidad de análisis de alimentos, medicamentos veterinarios, diagnóstico de enfermedades animales, como así también en el control de equipos de diagnósticos y en la producción y control de biológicos.
Sin embargo, el análisis de aditivos, envases y conexos mostró una sobreejecución como consecuencia del incremento del número de solicitudes recibidas.
El programa Aprobación de Agroquímicos, Productos Farmacológicos y Veterinarios cuenta con un crédito de $1,7 millones lo que representa un 29% menos que en 1999.
Los controles de importación y exportación de productos farmacológicos veterinarios y productos alimenticios para animales mostraron desvíos positivos como consecuencia del aumento de la demanda externa.
Sin embargo, en las habilitaciones de establecimientos de productos alimenticios para animales y productos farmacológicos animales, como en las aprobaciones de productos alimenticios para animales y productos farmacológicos para animales, las metas programadas se vieron perjudicadas por demoras y modificaciones administrativas.
Los objetivos del programa Fiscalización Agroalimentaria son (a) dar seguridad a los usuarios por la calidad de los productos que se comercializan, (b) velar por el cumplimiento de las normas armonizadas en el Mercosur y Cosave, y (c) fiscalizar los programas nacionales de protección vegetal.
Las metas propuestas para el año 2000 se ajustaron en general a lo ejecutado en 1999, teniendo en cuenta los cambios cíclicos y tendenciales en las diversas actividades.
Los créditos otorgados para Fiscalización Agroalimentaria para el año 2000 fueron de $33,4 millones, lo cual mostró un descenso del 12,3 % con respecto a 1999.
Se produjeron desvíos por menor demanda en aprobación de productos alimenticios y en las certificaciones sanitarias en productos de importación. Por el contrario el desvío positivo en certificaciones sanitarias en productos de exportación se originó en respuesta a la mayor demanda.
Los controles en aduanas secas y pasos fronterizos fueron menores debido a la suspensión del régimen simplificado de exportaciones.
La fiscalización de alimentos de origen pesquero mostró una sobreejecución originada en el potencial cierre del caldero para la pesca de merluza hubbssi o "paros biológicos", en consecuencia se produjo una mayor cantidad de pesca en el caladero efectivizando un aumento temporario de exportaciones u operaciones comerciales.
Con respecto a la fiscalización de la faena de ovinos se observa un desvío positivo generado por diversos motivos: el aumento significativo de la actividad desde el inicio de la zafra; factores climáticos en época de parición favorables para la retención de vientres en el último trimestre de 1999, que provocó una mayor disponibilidad de animales para el primer trimestre y la resolución Nº 51/00 que exceptúa el pago de la tasa sanitaria por la faena de esta especie, favoreciendo la exportación de este rubro. En cuanto a la faena de porcinos se vio incrementada a raíz de un aumento en la demanda.
El programa Sanidad Animal contó con un crédito de $25,9 millones, que representa un aumento del 29% con respecto a 1999.
La retracción de la demanda del mercado importador explica los desvíos en la expedición de certificados de calidad genética.