4.3 Transporte
Las principales acciones que se llevan a cabo en esta función son: apoyo al desarrollo de los servicios públicos y privados de transporte terrestre, fluvial, marítimo y aéreo, tanto en lo que respecta a transporte de pasajeros como al de cargas; asimismo, se emprenden acciones de construcción, remodelación y mantenimiento de infraestructura de caminos, autopistas, rutas, túneles, puentes, puertos, aeropuertos y canales de navegación.
El aumento del gasto en el Programa de Obras Públicas, con relación al ejercicio anterior, se debió principalmente a las transferencias destinadas a la ejecución de las obras del Puente Rosario-Victoria, siendo transferidos por tal concepto 40,4 millones de pesos durante 1999.
La Dirección Nacional de Vialidad tuvo una ejecución financiera de 312,1 millones de pesos; respecto al año 1998 implica una disminución de 230,5 millones de pesos. Este comportamiento se originó por el menor nivel crédito autorizado al organismo.
En el cuadro siguiente se pueden observar las distintas categorías de gestión que la Dirección Nacional de Vialidad ha establecido para el mantenimiento, rehabilitación y construcción de rutas.
Se observa una mayor ejecución física en el servicio Construcción de nuevas rutas con respecto al año anterior. Ello obedeció a que a que durante 1999 se certificó la finalización de kilómetros cuya construcción fue financiada durante años anteriores.
A su vez, el incremento de los kilómetros atendidos directamente por la Dirección Nacional de Vialidad (mantenimiento por administración) responde a una menor cantidad de kilómetros atendidos por otros sistemas de gestión (mantenimiento por Contrato, mantenimiento por Convenio y Concesión sin Peaje).
Las restricciones presupuestarias obligaron a renovar las curvas de ejecución de las obras quedando, no obstante, deudas por certificaciones al cierre del ejercicio.
Dentro de la Asistencia Financiera a Sectores Económicos, se encuentran los créditos asignados al apoyo de los Operadores Privados de la concesión de ferrocarriles FEMESA, tanto para financiar gastos corrientes de explotación así como para financiar el plan de inversiones por cuenta y orden del Estado Nacional, devengándose en 1999 41,2 y 99,5 millones de pesos respectivamente. El gasto cayó un 43,2% respecto a 1998, en relación directa al menor crédito anual inicial y a la reducción presupuestaria implementada por el Decreto 455/99. La baja se justifica en parte por el hecho de que en la medida en que transcurre el tiempo, los subsidios estatales al Ferrocarril deben ir disminuyendo en cada ramal o incluso desapareciendo en algunos de los mismos, sin embargo existieron obligaciones pendientes de cancelación.
Con relación a los Subsidios a Empresas Públicas, Entes Binacionales y Concesionarios de Servicios Públicos, la fuerte caída en los gastos durante 1999 respecto a 1998 se debió a que las empresas residuales en liquidación van reduciendo sus obligaciones de pago de pasivos y sus gastos de funcionamiento e incluso son liquidadas o concesionadas al sector privado. El 85% de la disminución en transferencias otorgadas se debe a que en 1999 el Ferrocarril General Belgrano S.A. recibió, para financiar gastos de capital, 26,4 millones de pesos menos (29,2 millones de pesos para 1998 y 2,8 para 1999).
El Órgano Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (ORSNA) entró en operaciones en el último trimestre de 1998 como consecuencia de la privatización de los Aeropuertos Nacionales. El gasto durante 1999 fue superior al de 1998 en 8,2 millones de pesos. El mismo se debió, principalmente, al mayor devengamiento en: gastos en personal permanente (2,6 millones de pesos), servicios no personales (2,6 millones de pesos) y bienes de uso (2,7 millones de pesos).
A continuación se reproducen los indicadores físicos correspondientes a los programas de la Fuerza Aérea Argentina que se incluyen en esta función:
La baja ejecución en transporte de carga se origina en la concurrencia de varios operadores en un mercado restringido.
El menor gasto que registró en 1999 (25,6 millones de pesos menos) el programa de Apoyo a la Actividad Aérea Nacional con respecto al año anterior correspondió principalmente a la eliminación del gasto en bienes de uso, consecuencia de la tercerización del servicio de los aeropuertos. Esto no se vio reflejado en los indicadores físicos del programa, ya que éstos corresponden básicamente a la actividad que permanece bajo responsabilidad de la Fuerza Aérea.
No obstante, se destaca la baja ejecución de algunas metas. La cantidad de técnicos capacitados fue inferior a la estimada inicialmente debido a una reprogramación en el plan de cursos. Asimismo, en la publicación de las cartas aeronáuticas se presentaron inconvenientes de impresión y distribución.
La sobreejecución en el Servicio de Protección de Vuelo y Ayuda a la Aeronavegación se originó en un incremento en el movimiento de aeronaves.
Dentro del programa Transporte Terrestre (incluido en el concepto "Resto", en el cuadro de la Función Transporte), se encuentra el Proyecto de Transporte Urbano de Buenos Aires. Dicho proyecto presenta un crédito final de 17,6 millones, siendo dicha suma destinada a las obras en la Línea A del Subterráneo de Buenos Aires, al Estudio Integral del Transporte y a consultorías varias. Cabe destacarse que la ejecución de las actividades mencionadas se inició en el tercer trimestre de 1999, pasando de un gasto de 1,1 millones de pesos en el primer semestre a 13,6 millones de pesos para el final del período.